miércoles, 24 de julio de 2013

NOSTALGIA DE LOS MOCASINES BLANCOS DESDE YOKNAPATAWHA

Primero sucedió con las noches: estaban llenas de encanto y de transgresiones, y luego se convirtieron en caras y masificadas; luego pasó con los veranos: estaban llenos de encanto, de largos viajes en tren y de mocasines blancos, y luego se transformaron en caros y masificados, si no bajo la "abominación de la chancla". (Más inflexibles se mostrarán los estetas contra ella, que los moralistas contra Sodoma y Gomorra...)
Mejor quedarse en Madrid para recoger el oro de su luz con el que hacer frente a las necesidades. Y eso que os estoy escribiendo desde el YOKNAPATAWHA de aquel autor genial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario